Gatika Kaliente le preguntó si se callaría antes de llegar allí y él aceptó. Cuando giró la cabeza para verme, Gatika Kaliente se acercó y me susurró al oído, "puedes tomar tanto o tan poco de mi coño como quieras, tú decides". "Le cogí la mano y le llevé hasta donde estaba mi coño, justo delante de él. Empezó a morderse el labio inferior y a respirar con dificultad, pero estaba muy duro y excitado. "Bien, cariño, necesito que te pongas esto en la boca y que lo mojes bien", dijo. Me quedé mirándolo fijamente. "No, quiero estar en la parte superior y hacer lo que me dijiste que hiciera" le dije. Se levantó y dijo: "Así es, cariño, sube a la cima y espera hasta que te diga que vengas". "No, quiero que me cojas, es todo lo que quiero. "Le contesté. Me detuvo y nos quedamos ahí acostados mientras me decía qué hacer y que me pusiera en posición. Lentamente empezó a frotar su polla en mi coño mientras me decía lo que iba a hacer. Una vez que terminó, empezó a frotarla más y más rápido. Yo gemía cada vez más fuerte, pero no dije nada. Se acercó y me sostuvo la cabeza con una mano mientras tomaba su mano e introducía su polla entre mis labios...