S Mailleee saltó cuando la aparté y al principio no podía dejar de mirar sus tetas desnudas. Sus pezones habían subido un poco, aunque S Mailleee no parecía mostrar ningún signo de estar nerviosa. Le sonreí e intenté calmar sus preocupaciones hablando de la red de satélites, pero estaba claro que S Mailleee todavía estaba un poco perturbada. Pero mientras hablaba pude ver que S Mailleee comenzaba a relajarse, y fue con una sonrisa creciente que me volví para irme. "Sabes, tengo algunos problemas con eso", dijo S Mailleee, señalando el suelo. "Lo único que me preocupa es que no es una solución permanente para la pobre chica que es responsable de las baterías. Esperaba que las grabadoras vinieran con las bolsas, pero eso parecía poco realista. "No sé nada de eso", dije. "Mis dos amigos no se han quejado en absoluto. "Ya veremos", dijo S Mailleee, mirando hacia abajo y poniéndose la camisa en la cabeza mientras yo me abría paso entre las bolsas. "Sabes, esto suena bastante raro, pero creo que me voy a mudar contigo. "¿Por qué?" Pregunté, sin entender por qué S Mailleee estaba de repente un poco reacio a irse...