Xollan se movió hacia adelante en su pequeña silla, soltando a Jacob de sus rodillas, deslizando sus resbaladizos dedos alrededor de su polla, agarrando sus bolas y empujándolas suavemente de vuelta a su entrepierna. "Puedo aguantar un poco más", gimió Jacob y respiró hondo otra vez, rompiendo el beso con Xollan y mirándola a los ojos. "Entonces iremos al grano, ¿no?" le preguntó mientras se acercaba a ella. Xollan lo miró con adoración y sonrió, empujando su cara hacia delante para besarlo y besar la parte inferior de su cabeza. "Jacob, tenemos un trato", dijo Xollan antes de que sus ojos tuvieran la oportunidad de cruzar los de ella. Xollan empezó a pasarle la mano por la espalda, la punta de sus dedos se hundió en su piel y la extendió y engrosó bajo ella, provocando una sonrisa de él. "Ya lo tienes", dijo Xollan con un guiño mientras ella le besaba el cuello. "Bueno, ahora me toca a mí", dijo él con una risa mientras empezaba a deslizar su polla entre sus muslos hinchados, a lo largo de sus muslos internos. "Te voy a montar bien y despacio", dijo Xollan y se rió mientras doblaba la cabeza para besarle la sien. "Sí", jadeó, levantando las caderas y empezando a empujar hacia delante. Xollan no estaba listo para que él entrara en ella, pero ella se acercó para acariciarle la polla una vez que estaba en ella. Xollan gimió y cerró los ojos de ella mientras Jacob empezaba a dar sus empujones. "Dios mío, tu coño se siente tan increíble", dijo. "Me alegro tanto de que te guste", dijo Xollan y lo besó...