Me lo puso mientras le veía el video para que Sallysecret pudiera fingir que lo veía mientras jugaba con ella. Una vez, su amiga terminó y estábamos filmando el video y Sallysecret comenzó a besarme y a chuparme la verga. La sentí chupar tan apasionadamente que me tiró del nervio de mi vibrador. Sallysecret sintió mi clítoris. La sensación fue eléctrica. Estaba en mí. De repente oí a Ramón decirle que parara y Sallysecret se apartó de mí y dijo que no quería sentir su semen en su coño. Sallysecret se metió en la ducha y se la lavó. Nunca la volví a ver después de eso. Me quedé atrapado como un antiguo esclavo. Apenas había hablado con ella en años y ahora vivía para complacerla. No quería seguir así. Un día fui al gimnasio y vi a un sexy hombre negro sentado en un banco. Me pregunté quién era. Pensé que sería una buena elección para cogerme. Medía 1,80 m, 1,80 m y era negro. Tenía el cuerpo de un jugador de baloncesto competitivo. Tenía brazos musculosos y un pecho musculoso. Tenía el pelo largo, grueso y rizado y cuando lo vi inclinarse sobre el banco para verme en cuclillas, mi cerebro empezó a hormiguear. Noté a otro tipo inclinándose sobre el banco con la espalda hacia mí. La parte delantera de su camiseta blanca estaba cubierta de círculos blancos que parecían kilómetros y kilómetros. Pensé que era un astronauta. .