Le encantaba que le dieran por el culo, pensó Kerayz. Ella era su compañera de follaje interior, algo que Kerayz nunca había sido antes. Su posición era tan sexy, que a él le costaba asimilarlo todo. Sentía una sensación física tan masiva, a través de todo su ser. Y esto era lo mejor y lo peor de todo. Su polla se endureció de nuevo, sus bolas se apretaron, y comenzó a pensar en lo que quería hacer con su polla. Sin revelar ninguno de sus secretos, Kerayz bajó su cara sobre sus mejillas llenas de culo, y aspiró el aire mientras miraba hacia la profunda hendidura que era la cara de Gloria. Kerayz giró ligeramente la cabeza y su boca encontró sus suaves pero tiernos labios. Empezó a lamer y chupar su mejilla, y Kerayz gimió y arqueó su espalda más de lo habitual. Experimentaba un placer tan maravilloso que Kerayz apenas notó la malvada sonrisa de Michael y sus placenteros suspiros después del orgasmo. Tan absorto en su propio placer, Kerayz no se dio cuenta del pie desnudo sobre su pecho o del algodón suelto que envolvía su cuello, el cual fue levantado sobre su cuello en un movimiento repentino e inesperado. De repente sintió el pie desnudo sobre su pecho, y se sacudió un poco. Kerayz trató de moverse para acomodar el peso casi visible, pero la chica que estaba encima de él lo sostuvo en su lugar. .